domingo

EL VALOR DE UN COBARDE


Título original
Quinto: non ammazzare (El valor de un cobarde)
Año
1969
Duración
93 min.
País
Italia
Director
Leon Klimovsky
Guión
Manuel Martínez Remís
Música
Pietro Umiliani
Fotografía
Giuseppe La Torre

Reparto

Steven Tedd (Peter Martell), Sarah Ross, German Cobos, Alfonso Rojas, Roberto Camardiel, Diana Sorel, Alfonso de la Vega, José Marco.

Sinopsis

Un grupo de forajidos, haciéndose pasar por leprosos, asalta un banco sin que nadie intente impedirlo. Se refugian en una solitaria parada de postas donde intentan averiguar quien de ellos les ha traicionado quedandose con el dinero.

Curioso gazpacho-western, obra del prolífico y polifacético León Klimovsky, que igual filmaba un spaghetti que un giallo o una comedia, sin cortarse un pelo. Aquí, más que un western, la trama es de un film noir serie B, con un reducido grupo de bandidos encerrados en una parada solitaria, esperando descubrir al traidor que les robó el botín de su último atraco.

Funciona mejor como thriller, y dentro de este género tiene cierta solvencia, apoyándose en las interpretaciones más que dignas de Alfonso Rojas, Germán Cobos y Roberto Camardiel. Como western es olvidable, sin duelos, sin espacios abiertos, sin cabalgadas, sin héroe...y sin dinero, porque la falta de medios, habitual en el género, es aquí tan absoluta que produce incluso pena. Steven Todd, el protagonista, no es otro que Peter Martell, uno de los peores actores que se recuerdan, y además en un papel ridículo y absurdo que termina por destrozar el film.

¿Que por qué incluyo este bodrio en el Blog? Realmente no lo sé, aunque quizá por su "exotismo". Es una película que no conoce nadie, ni los más avezados cazadores de spaghettis. O quizá por Sarah Ross, la novia del jefe Black (Alfonso Rojas), pseudónimo de no sé qué actriz, que intervino en otras dos o tres películas y desapareció del mapa. Pero es una delicia verla haciendo de mujer dura y mala, muy dura y muy mala...y muy, muy interesante.

PETER MARTELL

Su nombre real era Pietro Martellaza.
Nacido en Bozano (Italia) en el año 1938.
Antiguo Mister Italia, comienza en el cine como especialista, para después pasar a ser actor.
Su carrera pudo cambiar cuando le contratan para rodar un spaghetti junto con Bud Spencer con el titulo de "Tu perdonas...yo no".
Pero poco antes de comenzar el rodaje Peter tiene una discursión con una amiga, y después de dar una patada a la pared, se fractura el pie, y Terence Hill le sustituye, siendo la película un gran éxito, y un tren que pasa de largo para Peter.

Nunca llegó a ser una estrella de primer nivel, pero fue un habitual en el genero.

Por desgracia, a partir de mediados de los setentas al actor cada vez le llamaban menos para trabajar, y su situación pasó a ser tan mala economicamente que terminó viviendo de la caridad en una destartalada caravana, llegando a intentar suicidarse.
En 1997, un documental en la televisión italiana descubre a Italia sus penurias, y valió para que Peter recibiera una pensión y un pequeño apartamento y poder cuanto menos tener una vida algo más digna. Hasta tuvo la oportunidad de volver a trabajar en el cine, aunque en pequeños papeles en discretas producciones.

El pasado cuatro de febrero de 2010 murió en su Bolzano natal.

Filmografía SW:

1966- Chamango el vengado (Chiedi perdono a Dio... non a me)
1966- Arizona Colt
1966- Due once di piombo
1967- Lola Colt
1967- Dos cruces en Danger Pass
1967- Con lui cavalca la morte
1967- La Furia de Johnny Kid
1967- I lunghi giorni dell'odio
1968- Il lungo giorno del massacro
1968- Cjamango el Vengador
1968- Dio li crea... Io li ammazzo!
1968- Dos hombres van a morir
1969- Ciakmull, puerta abierta al infierno
1969- Il Pistolero dell'Ave maria
1970- Giunse Ringo e... fu tempo di massacro
1971- Il Suo nome era Pot
1971- Era Sam Wallach... lo chiamavano 'così sia'
1974- Caray, qué palizas!

LEON KLIMOVSKY

Director Argentino nacido en Buenos Aires el 16 de octubre de 1906.
Klimovski iba para dentista, pero su pasión por el séptimo arte le hizo dedicarse al cine en cuerpo y alma, comenzando creando el primer Cineclud de Argentina. Como aquello no terminada de llenarle, pronto comenzó a dirigir cortos y algunos primeros largos.
A mediados de los años cincuenta, Klimovski emigra a España, donde termina afincándose para siempre.

Con un afán desmedido por hacer cine, es un director que no duda en poner en pie cualquier película que le ofrezcan o caiga en sus manos, haciendo que su filmografía, con cerca de sesenta títulos, a la par que irregular sea de una variedad de géneros notable, pasando por casi todos.

En el capitulo sobre el spaghetti, en general eran bastantes olvidables, rodados con pocos presupuestos y casi sin guión, haciendo que no sea precisamente un director estimado por los aficionados.

Otra cosa es sin embargo su posterior paso por el Terror, en el cual los estudiosos del asunto afirman que si aportó algunos títulos de indudable valor, sobre todo sus trabajos con el actor Paul Naschy.

Algunas comedias, cine de detective,el casi obligado cine de destape/erótico y cualquier otro genero que estuviera en alza componen el resto de trabajos del director, que a finales de los años 70 se despidió con "Violación fatal" (78), aunque un año después dirigió "La Barraca", una serie de televisión.

Hay también que resaltar que en algunas ocasiones aparecía como actor en películas de otros directores, como "Amo tu cama rica" o "El robobo de la jojoya", y tiene filmado como guionista cerca de una docena de títulos. Pese a que nunca contó con el favor del publico ni de la critica, en 1995 recibió el premio de honor de la Asociación de Directores de España, un galardón que sin duda le llenaría de satisfaction.
Un año después, en 1996, moría en Madrid.

Filmografía SW:

1962- Torrejón City
1964- Fuera de la ley
1966- Dos mil dolares por Coyote
1066- Alambradas de violencia
1967- Un Hombre viene a matar
1969- Pagó cara su muerte
1969- El Valor de un cobarde
1970- Reverendo Colt
1970- Un Dólar y una tumba
1971- Un Dólar para Sartana

ALFONSO ROJAS

Asiduo actor de reparto de los spaghetti westerns.
Su nombre completo era Alfonso Rojas Melquíades nacido en Jerez el 5 de marzo de 1916, a los pocos años de edad su familia se traslada a Sevilla, donde él cursa Estudios en la Escuela de aprendices de Artillería, logrando el titulo de delineación.
Después de acabar la Guerra civil, Rojas se traslada a la capital a buscarse la vida.
Rojas tiene varios trabajos a lo largo de los años, la mayoría relacionados con el mundo del cine y el teatro, hasta que en el año 1945 comienza su carrera como actor de reparto en "Los últimos de Filipinas".

Su carrera, de cerca de un centenar de títulos, se basó en las películas de géneros de aquellos años, en el que por supuesto el spaghetti western tuvo su importancia a partir de los años sesenta.

Y es que Rojas participó en el primer western rodado en Almeria, "Tierra Brutal", y a partir de entonces sería un habitual en la mayoría de los westerns españoles. En el año 1972 deja el cine, pasando a dirigir su propio restaurante en Madrid. El 20 de enero de 1996, fallecía Alfonso Rojas. Como homenaje, el Ayuntamiento de Jerez decidió ponerle su nombre a una calle.

Filmografía SW:

1961- Tierra brutal
1962- El sheriff terrible
1963- El sabor de la venganza
1963- El vengador de California
1963- Gringo
1964- Relevo para un pistolero
1964- Brandy
1964- Los gemelos de Texas
1964- Antes llega la muerte
1965- Minnesota Clay
1965- Johnny West
1965- Aventuras del oeste
1965- Un lugar llamado Glory
1965- Ringo de Nebraska
1966- Dos mil dólares por Coyote
1966- Mestizo
1966- Héroes a la fuerza
1966- El hombre del sur
1966- Alambradas de violencia
1967- Dinamita Joe
1967- El hombre que mató a Billy el niño
1967- Cara a cara /// Reseña Adicional
1968- Freda West
1968- Dos hombres van a morir
1968- Uno a uno sin piedad
1968- El sabor del odio
1968- Matalos y vuelve
1969- El valor de un cobarde
1969- Garringo
1969- Los desesperados
1970- Reza por tu alma... y muere (Arriva Sabata!)
1971- Reverendo Colt

sábado

LOS SIETE MAGNIFICOS


THE MAGNIFICENT SEVEN Estados Unidos 1960
DIRECTOR John Sturges
GUIÓN William S. Roberts MÚSICA Elmer Bernstein FOTOGRAFÍA Charles Lang Jr.
REPARTO Yul Brynner, Steve McQueen, Charles Bronson, Eli Wallach, James Coburn, Horst Buchholz, Robert Vaughn, Brad Dexter, Whit Bissell, Vladimir Sokoloff

Un pueblo mexicano se halla a merced de una despiadada banda de forajidos. Sus habitantes, campesinos que no saben defenderse, deciden contratar los servicios de siete pistoleros.

Sturges recoge la semilla de "Los siete samuráis", de Kurosawa, y monta un western con reparto de rostros afilados y sangre roja como la pasión. Más sugestiva que magistral, ha pasado a la historia por su banda sonora.

La escena final de la película narra la salvaja batalla final entre los hombres de Calvera y los magníficos de Chris. La maestría de Sturges sirve un final sin tregua, donde van cayendo los hombres que pusieron sus revólveres al servicio de un grupo de inocentes campesinos. Solamente quedan dos...

martes

BRANDY


Brandy
España/Italia
1964
Director: José Luis Borau
Reparto: Alex Nicol, Robert Hundar, Renzo Palmer, Giuseppe Addobbati, Luis Induni, Antonio Casas, George Rigaud, Natalia Silva, Manuel Ayuso, Paola Barbara, Maite Blasco, Frank Braña, José Canalejas, Vicente Cárdenas, Wilfredo Casado, Alfonso de la Vega, Rafael Bejarano, Jorge del Moral, Pedro Fenollar, Antonio Gradoli, Rafael Hernández, Mark Johnsson, Juan Lizárraga, Victor Bayo, Miguel del Castillo, Pedro Orengo, Giovanni Petrucci, Héctor Quiroga, Alfonso Rojas, Elena Santonja, José Villasante, Antonio Zamora, Maria Ranera
Guión: José Luis Borau (basado en un relato de José Mallorquí)
Fotografía: Manuel Merino, Mario Sbrenna
Música: Riz Ortolani

Coproducción italo-española de 1964 que supuso el debut (hasta ese momento sólo había realizado tres cortometrajes) de José Luis Borau (“Furtivos”, “Hay que matar a B.”), uno de los cineastas más polifacéticos del cine español.
La ciudad de Tombstone vive bajo la extorsión, al más puro estilo mafioso, de sus prohombres (el juez, el alcalde, el banquero, el dueño del saloon) que liderados por Beau obligan a los comerciantes y rancheros a pagar un impuesto para garantizar su protección. Tras ser asesinado el antiguo sheriff (única figura que intentaba contrarrestar la situación), será elegido como nuevo hombre de orden, con la intención de que se convierta en un títere en manos de los poderosos, el borracho del pueblo apodado Brandy; pero éste, inesperadamente, se convertirá en el líder que la población necesitaba para acabar con esta situación enfrentándose a los extorsionadores y acabando con la tiranía.

Nos encontramos ante la típica película de encargo que, en esta ocasión, se mueve dentro de los parámetros del western clásico de bajo presupuesto a través de un eficaz, sencillo, convencional y un tanto estereotipado guión obra del propio director y del exitoso novelista barcelonés Jose Mallorquí (prolífico autor cuyo personaje “El Coyote” había sido llevado a la pantalla grande en la década de los cincuenta por el mayor de los hermanos Marchent y que colaboraría con éste en la elaboración de los guiones de sus películas sobre otro personaje popular, “El Zorro”).

Entre los aspectos que más me han llamado la atención del film destacaría:

La excelente labor en la dirección de Borau (no en vano obtuvo el premio “Antonio Barbero” al mejor director novel concedido por el Círculo de Escritores Cinematográficos de España) que se caracteriza por su elegancia y por un especial cuidado en la planificación y composición de las escenas (a título de ejemplo destacaría la bellísima escena rodada en un solo plano en la que la señora Garrido recoge en una carreta a Steve Turner).

Su cuidada factura técnica. Así el film cuenta con un gran trabajo como director de fotografía de Manuel Merino y, a pesar de su limitado presupuesto, con una estupenda labor de ambientación de la que supongo no es ajena la participación de la Produzioni Europee Associati de Alberto Grimaldi, productor responsable de gran parte de los mejores spaghetti westerns (“Antes llega la muerte”, “La muerte tenía un precio”, “El bueno, el feo y el malo”, “El halcón y la presa”, “Cara a cara” o “Salario para matar”).

El mensaje un tanto progresista de la película, en un momento en que la censura campaba por sus anchas en España, ya que describe una sociedad corrupta y autoritaria controlada por unos pocos y en la que los poderosos (autoridades políticas, representantes de la justicia, grandes comerciantes) explotan al pueblo llano al que no le queda más remedio que unirse para enfrentarse a la tiranía. En este sentido cobra gran importancia la figura del párroco (en un momento en que comenzaron a proliferar los llamados curas obreros como el padre Llanos) interpretado por el italiano Renzo Palmer que, tras asistir a la voladura de un negocio por negarse su dueño a ser extorsionado, implorará: “Hasta cuando Señor sufrirá tu pueblo la tiranía de sus enemigos” y que participará activamente en el tiroteo final, o la asamblea de los habitantes de la ciudad en la que deciden rebelarse y acabar con esa situación porque “nadie puede hacer nada por nosotros salvo nosotros mismos”.

La influencia de ciertos westerns y, en concreto, de “El Dorado” y “Río Bravo”, sobre todo en el personaje de Brandy pero también en algunas situaciones y escenas (aquí también hay una secuencia musical, menos afortunada que la de “Río Bravo”, que se desarrolla en la oficina del sheriff).

Por lo que respecta a los actores, Alex Nicol (actor norteamericano encasillado por lo general en roles negativos que rodó un buen puñado de western en España) hace un gran trabajo como Brandy, un hombre torturado por alguna desgracia del pasado que nunca conoceremos, lo que le ha llevado a intentar cicatrizar sus heridas con la bebida, pero que tendrá la suficiente dignidad como para asumir el cargo de sheriff, con el consecuente riesgo, y de liderar a sus vecinos contra la tiranía. Junto a él, un estupendo y siniestro Robert Hundar que aporta su amenazante físico a Moody, el matón contratado por los extorsionadores que se caracteriza por vestir de negro (incluso su caballo es de este color), un eficaz Antonio Casas como el honrado, apesadumbrado y desdichado sheriff, un correcto Jorge Rigaud en el papel de Beau el líder de los extorsionistas y Maite Blasco en el principal papel femenino que protagoniza la escasamente desarrollada historia de amor con Brandy. Quizás el único actor que desentona sea Luis Induni al que no le va en absoluto el papel de letal cow-boy.
En definitiva me ha parecido un dignísimo y bastante cuidado eurowestern que, a pesar de su inicio un poco lento, se ve con agrado pero que está muy alejado, tanto temática como estéticamente, de los típicos spaghettis.

sábado

GRUPO SALVAJE


THE WILD BUNCH Estados Unidos 1969
DIRECTOR Sam Peckinpah
GUIÓN Walon Green & Sam Peckinpah MÚSICA Jerry Fielding FOTOGRAFÍA Lucien Ballard
REPARTO William Holden, Ernest Borgnine, Robert Ryan, Edmond O'Brien, Warren Oates, Jaime Sanchez, Ben Johnson, Alfonso Arau, L.Q. Jones

Un grupo de veteranos atracadores de bancos, desarraigados ladrones que viven al margen de la ley y que actúan en la frontera entre los Estados Unidos y México, se ven acorralados por unos cazadores de recompensas y el ejército méxicano.

Los títulos de crédito iniciales de ‘Grupo salvaje’ muestran el camino que la película tomará a lo largo de más de dos horas. Mientras el grupo, vestidos de soldados, se dirigen a caballo a atracar un banco, vemos a un grupo de niños ajenos a la acción y practicando un tenebroso juego: echar a un escorpión a miles de hormigas hambrientas que lo devoran poco a poco, para luego prender fuego a las hormigas. Los niños observan tan terrible acto con total impasibilidad, mientras Peckinpah nos cuenta con ello el resto de la película. Cuando la cámara enfoca primeros planos de los actores, para sobreponer el nombre, la imagen se congela virando a una especie de espectral dibujo del personaje, como si de un fantasma se tratase. La muerte pues, marca desde el inicio del film a los personajes. Una muerte que tendrá lugar tras el más grande, e inevitable, río de violencia que se haya visto.

‘Grupo salvaje’ es recordada sobre todo por su impresionante tiroteo final, que Peckinpah utiliza para liberar a sus personajes de todas sus cargas. Cuando Pike, Dutch, Lyle y Tector deciden ir a rescatar a su amigo Angel de las garras de Mapache, saben que será un camino sin retorno, que no regresarán de dicha misión. Y toman esa decisión porque saben que sólo pueden terminar así, con coherencia a como han vivido, como pago a sus pecados. Tras una larga caminata —primero de los dos últimos momentos de tranquilidad que los protagonistas vivirán y en el que la tensión narrativa crece sin parangón— y presenciar como Mapache degüella delante de ellos a su torturado compañero, éstos le abaten a tiros. Con un conciso montaje de los rostros de los cuatro protagonistas, expectantes ante la reacción de los cientos de mexicanos que allí hay, se produce el último momento de paz, el último respiro de tranquilidad que vivirá el grupo salvaje, la tensión alcanza su máximo punto, Borgnine se ríe, se libera la tensión, la violencia explota, y la muerte aparece.

Pero aunque ‘Grupo salvaje’ es una historia llena de violencia, a ratos insoportable, se ven en ella algunos matices que ponen en la mirada de Peckinpah cierto punto de esperanza hacia sus malditos personajes. Con un inusitado uso de los flashbacks —eliminados en un primer montaje por parte de la productora— en el que vemos el pasado conjunto de Pike y Deke, éstos añoran sus tiempos de amistad, una amistad traicionada, que se sellaría indefinidamente como elemento común en la filmografía de Peckinpah. Dicha amistad se ve latente en secuencias como la que transcurre tras descubrir los protagonistas que han robado anillas de metal en vez de oro. Nada pueden hacer y sólo les queda reír, escenas recordadas en el cierre del film, mientras Robert Ryan y Edmond O´Brien se alejan.

‘Grupo salvaje’ fue un éxito, directores como Martin Scorsese y George Lucas lo consideraron el mejor western jamás hecho. Aún así, muchos quedaron escandalizados por el uso de la violencia en el film. Con todo y tras ‘El hombre que mató a Liberty Valance’ (‘The Man Who Shoot Liberty Valance’, John Ford, 1962), Peckinpah sentenció las claves del western crepuscular, ya tratado en ‘Duelo en la alta sierra’, y sobre el que volvería en su siguiente film.En Grupo Salvaje, los días del dorado Oeste hace tiempo que han concluido. El progreso ha terminada por arrinconar un mundo marcado por la violencia y la aventura, un estilo de vida que el cine americano se había complacido en mitificar desde sus orígenes, y que aquí aparece sumido ya en irremisible decadencia. En un Oeste crespuscular, unos personajes cuyo tiempo ha pasado, huyen o vagan en un paisaje cargado de atardeceres. No en vano casi toda la película transcurre en tierras mejicanas (como En Los Profesionales), reducto aún de aventureros incapaces de adaptarse a los nuevos tiempos. A lo largo de este exilio (forzoso o necesario), los protagonistas recapitularán sobre su vida y su destino. Por eso, Grupo Salvaje es una reflexión sobre la búsqueda del sentido y de la propia identidad. En ella, los temas recurrentes de Peckinpah alcanzan un dramatismo sobrecogedor: la fidelidad, la traición, la amistad, la independencia, el desarraigo, la épica de los perdedores, la búsqueda de la inocencia perdida.

Esta es la escena final, los cuatro de Holden contra el mundo en una de las matanzas más salvajes de la historia del western.